divendres, 26 d’octubre del 2012

Cuando la cabeza te dice: "STOP"



Así es, a veces pones todo tu empeño, ilusión, fuerzas y energías para hacer algo y existen tres opciones:

- La primera e idílica, es aquella en la que CABEZA Y CUERPO se unen para trabajar a la vez, es decir, se unen, EN el caso del deporte, para ser una auténtica máquina para entrenar y competir. Es en estos momentos en los que hay que aprovechar, sacar lo mejor de uno mismo, porqué es el momento ideal.

- La segunda y menos deseada es aquella en la que el CUERPO no quiere y la CABEZA dice sí. Es una situación menos deseada, pero la que más resultados a largo plazo da ya que son aquellos entrenamientos o competiciones que curten o hacen a uno más fuerte, sobretodo psicológicamente, ya que la cabeza ha podido a ese agotamiento, pocas ganas de hacer cosas, etc.. y  lo ha transformado en energía. BIEN! Punto para nosotros.

- La tercera y estoy seguro que la opción que nadie escogería si pudiesemos escoger, es la que me encontré yo a principios de este mes de octubre: CUANDO LA CABEZA NO QUIERE.

Después del Half Triatló de Berga, decido encarar los últimos dos meses de entrenos con mucha ilusión, ya que me quedaban dos pruebas que me hacían mucha ilusión, una por ser el triatló de mi ciudad, Vilanova i la Geltrú, y la segunda, por ser un reto importante, uno de esos que marcas en rojo: EL MARATÓN DE DONOSTIA, mi primer maratón.

Así pues, y gracias a mi entrenador Julio (Prepara-Tri), preparó y diseñó con el poco tiempo que nos quedaba una preparación para llegar a las dos competiciones bien a pesar de las alturas de temporada que nos encontramos y las muchas competiciones y entrenos que llevo en las piernas. Y así fue como las tiradas de running, se convirtieron en tiradas de mínimo 70', las series se iban alargando y la natación era más corta, pero con más "chispa" para coger ese puntito óptimo de velocidad para los sprints, pero al cabo de poco algo empezó a fallar........

Cada vez costaba más salir a entrenar, las ganas de querer finalizar la temporada y dejar a un lado dietas, descansos, series, etc.. en beneficio de un poquito de "mala vida" y alguna que otra noche de exceso, ganaban cada vez más peso. Así que después de comentarlo con amigos, compañeros, novia, etc... lo consulté con quien me podía dar una mejor respuesta, mi entrenador Julio quien me dijo la siguiente frase:

"Cada vez que he estado en tu situación, he parado y la temporada que viene será otra historia... Yo lo he hecho así y llevo ya 20 temporadas en el triatlón". "El diablo sabe más por viejo que por diablo" me dije a mí mismo.

Por lo tanto, creo que no hay ninguna duda de que a tu entrenador no sólo hay que hacerle caso en planificaciones, entrenos, etc... Un entrenador también esta para darte consejos a través de su sabiduría y su buen hacer y yo, tengo la suerte de tener un grandíssimo entrenador!

Así pues despues del 8,5K de Vilanova (La lluvia sólo nos permitió una carrera a pie), dí por finalaza la temporada 2012, balance de la cúal haré en mi próximo post.


BON COÛRAGE!


dimecres, 3 d’octubre del 2012

CARTA ABIERTA AL "SEÑOR" SALVADOR SOSTRES

Estimado "Señor" Sostres,

Dudo mucho que dedique el poco tiempo que tenga libre, entre gintónics, asados de tira y cohibas, para leerse está carta, pero de todas maneras la escribiré. No se preocupe, no encontrará aquí ni un insulto, en estos medios voy a ser todo lo políticamente correcto hacía su persona que no he sido en círculos más íntimos.

Primero de todo me gustaría, si así me lo permite, adjuntar el link de su artículo para hacer referencia a quien no se lo haya leído, es el siguiente:

http://www.elmundo.es/blogs/elmundo/guantanamo/2012/10/01/desperdiciar-la-vida.html

Bien, una vez realizadas las formalidades vamos al lío, intentaré ser corto y conciso:

Creo, espero y deseo que lo que ha escrito es un intento de ganar popularidad y lectores, un afán por conseguir el "que hablen de ti, aunque sea mal" para alimentar su afamado ego creado seguramente por un sinfín de inseguridades y traumas que le deben venir desde la infancia y, que probablemente, se hubiesen arreglado con buena ayuda médica o incluso un apoyo de algún amigo. Seguramente, haciendo referencia al deporte de esta manera, usted era, al igual que yo, de los que elegían siempre en último lugar cuando jugábamos a fútbol en el recreo. La diferencia entre usted y este servidor de usted, es que lo solucioné de pequeño ESFORZÁNDOME Y SUPERÁNDOME A MÍ MISMO, y ese niño rechonchito y lento, de repente se convirtió en el muro infranqueable de la defensa de Octavo de EGB.

A esto me refiero señor Sostres, a superarse a sí mismo y esforzarse, por eso hacemos el bestia como usted dice, por eso llevamos el cuerpo al límite, PARA SENTIRNOS VIVOS. Leí una vez en un artículo que el auge de los deportes de este tipo tiene una explicación antropológica: Las personas cada vez se sienten más y más enganchadas a estos tipos de retos y competiciones deportivas no sólo por la satisfacción de conseguirlo y la serie de reacciones de satisfacción que produce el deporte en el cuerpo humano, si no que además nos conecta con los instintos más primitivos de los seres humanos, aquellos instintos que se han quedado aletargados por las comodidades de la vida moderna. En resumen, el deporte de este estilo, nos hace ser más humanos que nunca.

No le contradigo al decir que se puede disfrutar de un buen cigarro, un buen whisky o vino o incluso una comilona de las de ordago. De hecho soy de "buen comer y beber" (fumar lo dejé hace ya 2 años), pero sólo es eso, DISFRUTE. El deporte aporta mucho más, además de calidad de vida y salud, que todo lo anterior la resta, aporta compañerismo, esfuerzo, solidaridad, superación, fuerza de voluntad, etc... valores intangibles que la sociedad actual parece haber olvidado en pro del consumismo, el egocentrismo y el sedentarismo.

Le invito a ir a ver una prueba de estas que usted denominada como "salvajadas". Ahí, le recomiendo sobretodo que vea las últimas horas y se fije en las caras de los participantes, van sufriendo sí, pero disfrutando como nunca, sintiéndose más vivos que nunca. Esta gente, Sr. Sostres, algunos llevan más de un año sacando horas por aquí, por allá, para poder entrenar debidamente y plantarse en la línea de salida con garantías para disfrutar la prueba.

Así que su artículo no es más que un intento de soslayar la autoestima de toda esta gente, entre la que me incluyo, que desean disfrutar de una vida sana tanto física como mentalmente, y tal harmonía solo es posible con el deporte "ANIMA SANA IN CORPORE SANO".

Quiero creer que el único motivo por el que ha escrito semejante sandez es por la envidia que siente y le dan todos los que día tras día, fin de semana tras fin de semana, nos levantamos bien pronto, bien pronto (como decía Guardiola) para entrenar su próximo reto y/o su deporte preferido, o incluso solo para realzar su figura, y usted, debido a su maltrecha autoestima, le gustaría hacerlo pero prefiere quedarse en, como dicen los psicólogos y coaches, la "zona de confort" con su whisky, su potaje y su buen cohiba. Adelante HÁGALO, a diferencia de usted, no lo voy a criticar por ello, pero no haga lo mismo con nosotros cuando de sobras se denota en su cara que muy muy de hacer deporte no es. Y si quiere criticarlo, o hacer demagogia sobre esto, practique deporte: Creo que no sólo le cambiará la visión de todo lo que usted dice, sintiendo vergüenza por lo que escribe a posteriori, si no que además le cambiará la vida, se lo puedo asegurar totalmente.

Atentamente,

Un triatleta.


PD: Se me olvidaba. Después de leer su tuit acerca de que después los comentarios vertidos es peor cultivar el cuerpo que la mente, CUIDADO CON ESO. El mundo de este tipo de deportes no es el mismo que el fútbol y le puedo asegurar que hay gente que le da mil vueltas a su "supuesta" cultura. En mi equipo de triatlón hay ingenieros, biologos, informáticos, abogados, gente con másters y de carrera, con varios idiomas y notas muy altas.
Cuidado porqué a lo mejor no solo se le deja en evidencia físicamente, si no que también podrían dejarlo en evidencia culturalmente.... Otra castaña más a su maltrecha autoestima, y no se si esta ya la podría soportar....